Una de las tendencias que se impone dentro del sector del acondicionamiento físico e incluso de cuidado del cuerpo y la salud a partir de la actividad física, es el entrenamiento funcional.
Entrenamiento funcional ¿Qué es?
El entrenamiento funcional también conocido como functional training, es una clase de entrenamiento personal que es bastante efectivo, en donde la búsqueda con la rutina consiste en que los ejercicios se adapten a las necesidades de cada persona, con el ánimo de así mejorar las funciones en el día a día y la calidad de vida.
Además de lo anterior, un entrenamiento con estas características se encuentra compuesto por ejercicios de carácter multiarticular y multimusculares, en donde la intención es que se desarrolle la inteligencia en los movimientos de la persona.
Diferencias del entrenamiento funcional y el convencional
Esta es una de las dudas que más suelen surgir al plantear un entrenamiento con las características de adaptación anatomica en los ejercicios que se seleccionan como el que se ha descrito en los párrafos anteriores.
Ahora bien, uno de los puntos clave es que en el funcional no existe el interés o la orientación por direccionar los ejercicios para la competición de ninguna clase, sino que en este caso lo que se pretende es mejorar la salud y promover el bienestar general.
De esta manera los entrenamientos de corte más clásico se concentran en los ejercicios aeróbicos más generalizados, sin que se piense a fondo en las necesidades particulares de cada persona que los ejecuta. Por su parte, el entrenamiento funcional lo que hace es siempre ubicar en un lugar privilegiado este tema, para que así el prácticamente saque el máximo provecho de su cuerpo o movimientos.
Por otro lado, es un entrenamiento en donde se incorpora lo mejor de distintos campos relacionados con su meta principal, así que desde el fitness hay varios aportes interesantes, también desde la fisiología y la biomecánica, en otras palabras, la adaptación a las necesidades y capacidades de cada quien es un asunto que no se toma a la ligera, sino que por el contrario es la base desde la cual se toman decisiones.
En conclusión, con este entrenamiento la persona va a mejorar sus capacidades físicas como por ejemplo la velocidad, fuerza o resistencia, pero también se van a ir trabajando otras capacidades que son necesarias para el día a día como la estabilidad, movilidad, agilidad, equilibrio o coordinación.