En una consulta de salud siempre es necesario que se exploren con el paciente opciones para crear hábitos saludables y en ese sentido, determinar si los hábitos que se tienen el momento son pertinentes para el cuerpo.
En ese sentido, en este caso se exponen los efectos del tabaquismo para la salud mental, ya que en la gran mayoría de los casos se piensa en las consecuencias de este hábito para la salud física y se descuidan todos los resultados negativos que el tabaquismo carrera para la salud mental de los fumadores.
Mejorar la salud mental al dejar de fumar
Casi siempre se suele afirmar que el cigarrillo es útil para aliviar los síntomas de la ansiedad y estrés. Esto se explica porque produce un efecto relajante o al menos se lo percibe. De todos modos, hay que mencionar que los componentes tóxicos de cigarrillo implican cambios en la química del cerebro, en particular la acción de la nicotina para relajar inmediatamente y por ende, asociar el cigarrillo con una opción para calmar la ansiedad.
Sin embargo, esta sensación es temporal y breve con una situación aún más grave, porque se va a despertar la abstinencia y los antojos. Incluso, investigaciones en las que se afirma que el consumo de tabaco puede explicar las altas probabilidades de ansiedad en las personas.
Relación entre tabaquismo y depresión
Por otro lado, la depresión cuenta con un vínculo estrecho con el tabaquismo. Son las personas que padecen este trastorno las que tienen una dificultad mayor para dejar de fumar, como consecuencia de la sensación de placer que la nicotina produce. De todos modos, no es del todo claro si fumar produce depresión o la depresión alienta a una persona a fumar.
Sin importar lo anterior, los componentes del tabaco van a ir deteriorando mecanismos cerebrales con los que se produce dopamina, que es la hormona clave para el bienestar. Es decir, en principio parece estimularla, pero a largo plazo va a ocasionar un bloqueo para su segregación.
Consejos para dejar de fumar y mejorar la salud mental
A continuación, se enuncian una serie de recomendaciones básicas para que usted empiece con su proceso de dejar de fumar:
- Diseñar un plan para dejar de fumar con un experto en salud.
- Mejorar cada uno de sus hábitos alimenticios.
- Incrementar el consumo de agua.
- Busque todo el apoyo profesional y familiar que sea necesario.