Una primera razón muy importante respecto a conseguir un tono firme en los músculos del Suelo Pélvico tiene que ver con su rol para sostener la zona baja del abdomen, además de permitir que los esfínteres puedan cumplir con sus tareas de un modo adecuado.
¿Por qué se puede debilitar el suelo pélvico?
Son muchas las posibilidades que se pueden considerar para que este tipo de situación ocurra. De todos modos, hay algunas circunstancias y afecciones que se pueden destacar como el parto, el embarazo, las cirugías, la menopausia, entre otros.
Las situaciones ya mencionadas es posible que debiliten los músculos del Suelo Pélvico, pero no se trata de una regla general. Más allá de lo anterior, en el cuerpo se pueden presentar disfunciones en esta área, lo cual puede significar: incontinencia urinaria, incontinencia fecal, problemas sexuales o prolapso genital.
¿De qué manera se pueden fortalecer los músculos del suelo pélvico?
Son diversas las técnicas y tratamientos que se pueden tener en cuenta para fortalecer los músculos de esta parte del cuerpo. Un ejemplo de lo anterior, son los productos especializados que son comercializados por tiendas certificadas como Martimedic.com. También es posible complementar este tipo de métodos con la gimnasia abdominal hipopresiva, masoterapia, electro-estimulación y cinsiterapia.
Ahora bien, entre los tratamientos que más se suele mencionar, la realización de los ejercicios de Kegel es sin lugar a duda, una de las alternativas que por lo general se suele seleccionar en este tipo de situaciones. Igualmente, tienen la ventaja que se pueden ejecutar desde casa o incluso mientras se está trabajando.
¿Qué son los ejercicios de Kegel?
A grandes rasgos, son una contracción de los músculos del suelo pélvico. Buscando la identificación correcta de los músculos que se tienen que contraer, en un próximo momento en que usted se dirija al baño para orinar, acá lo posible para detener el chorro de orina voluntariamente. La acción mencionada debe ser realizada durante estos ejercicios, además, la contracción de los músculos implicados es la que posibilita detener el chorro de orina.
Algunos de los ejercicios de Kegel que cualquier persona puede realizar son los siguientes:
- El lento – Es necesario contraer los músculos del suelo pélvico durante cinco segundos aproximadamente, esto mientras se respira con suavidad. Después relajar los músculos por otros cinco segundos. Repita en 10 ocasiones.
- El rápido – Hay que contraer y relajar los músculos tan rápido como le sea posible por un lapso de 2 a 3 minutos. Empiece con 10 repeticiones e incremente poco a poco hasta las 50 repeticiones en el día.
- El ascensor – Es necesario contraer los músculos con lentitud, imaginando que todo el proceso es similar al funcionamiento de un ascensor que sube con lentitud, pero que se va deteniendo unos pocos segundos en cada piso.
- La onda – Para su ejecución, se tienen que contraer en un primer momento los músculos que se encuentran alrededor de la uretra, después los de la zona anal, buscando que se relajen desde la parte de atrás hacia la delantera.